Ángel POY ROYO
Ángel fue para mí una persona entrañable, amaba a su ciudad con vehemencia y con demostrado cariño durante todos los años que trabajó al frente del consistorio municipal como alcalde hasta que a partir de 1975 finalizó su mandato, persona integra donde las hubiera, hasta el ultimo momento de su mandando y después del mismo, rehusó amablemente todos los cargos y posibles prebendas que le pusieron a su disposición integrándolo en el nuevo sistema político monárquico - parlamentario, lo menciono con conocimiento de causa, mi relación personal y profesional con Ángel comienza en 1978, todas mis especulaciones internas que pude hacer con su persona, chocaron siempre con una realidad blindada a prueba de todo, su honradez y su intachable conducta no se podían poner jamas en duda, dueño de una filantropía y un carácter educado, escuchador, dialogante con un verbo cargado de su extrema sabiduría propicio para captar la atención de las personas tertulianas, su humildad en todos los sentidos era palpable cuando tratabas con él, su predisposición desinteresada para cualquier evento o iniciativa con cara y ojos, él era siempre el que daba el primer paso, recuerdo que solía decir muchas frases que reflejaban su interior limpio y sincero, "jo soc pastó" real como la vida misma, fue pastor de ovejas porque le venia de familia, le conocía todo el mundo y el también en justa correspondencia, le acompañé durante seis años, a veces días enteros, yo que también me considero un gran escuchador, quedaba encandilado cuando tenia a bien versionar las cuestiones apoyandolas con tangibilidades irrefutables, nos reíamos muchisimo con sus salidas de humor mientras conducía su Citroen utilitario por caminos a veces y carreteras otras.
Lo cierto es que por mi parte también le hacia participe de mis ilusiones y esperanzas de toda índole y como estamos hablando de tiro olímpico, le puse al día de lo que tenia en mente para conseguir instaurar este deporte olímpico en nuestra ciudad, me aconsejó que deberíamos organizar bajo su hospitalidad como anfitrión en el marco de su chalet-cuartel ya que el edificio fue planificado como pequeño cuartel para albergar a los oficiales de la aviación italiana en el aeródromo que se construyó en los primeros años de la década de los treinta del pasado siglo XX en los alrededores de la ciudad de ROQUETES, una cena rustica en la que protocolariamente deberían asistir los representantes de los diferentes poderes de aquella ciudad y de TORTOSA, implicados o que tubieran alguna capacidad de decisión para aceptar la tramitación y dar luz verde al proyecto que teníamos en mente, me refiero a la construccion de la galería de tiro y la concesión de la pertinente autorización oficial de la misma, fue todo un éxito, asistieron los capitanes de la Guardia Civil y de la entonces Policía Armada, señores GRACIA y BELLO, un representante del Cuerpo Superior de Policía, el segundo presidente de nuestra Sección de Tiro Olímpico de Precisión de la Sociedad de Cazadores de Tortosa, Ramón VILAS, el Fiscal Jefe del Distrito Sr. SALOM, el Interventor de Armas de la Guardia Civil Sr. RIDER, el vocal de la Sección de Tiro Sr. MULET y yo mismo, Ángel como anfitrión y maestro de ceremonias, exhibió continuamente su buen hacer y mejores atenciones todo aderezado con su verbo inteligente y culto, redirigiendo convenientemente la conversacion siempre que era preciso hacia los temas que habían motivado la cena-reunión, pasaba el tiempo y gozamos de una temperatura soportable a pesar de ser invierno, el buen fuego el buen yantar todo regado con buenos caldos dio como resultado una plena y asumida colaboración para que cristalizase al poco tiempo lo que hasta aquellos momentos era un ilusión.
Ángel era el propietario de una empresa dedicada a desmontes de terrenos para obras públicas y privadas y transformaciones de fincas rusticas, poseía toda la maquinaria precisa para realizar tales cometidos, retro excavadoras de orugas, palas cargadoras, rulos compactadores, etc, cuando la Asamblea General como soberana de la Sociedad de Cazadores de Tortosa aprobó por unanimidad la cesión de una parte de su finca situada en la derecha del camino de entrada al barranco de San Antonio en el termino municipal de ROQUETES, en el paraje denominado Racó d,Homedo, fue el momento preciso para que dos de aquellas monstruosas maquinas empezasen a clavar los dientes de sus palas hidráulicas en el pedregoso terreno y en ocho horas de trabajo intenso coordinado por el propio Ángel guiando la acertada veterania profesional de los maquinistas uno de ellos Paco Franch PORRES, de La Cava y el otro Juanito CURTO de Campredó, abrieron el enorme foso de unos setenta y cinco metros de largo con treinta de ancho y cuatro de profundidad dejando a los lados acopio suficiente de tierra que con su altura protegería cualquier posibilidad de desvio de los proyectiles y dejando en el fondo un mayor acopio de tierra configurando un gran espaldón parabalas que evitaría cualquier accidente, se plantaron alrededor de todo el perímetro doscientos cipreses que con el tiempo consolidarían el terreno y protegerían las instalaciones de los vientos uracanadados del "vent de dalt" que baja acanalado por el valle natural que forma el rio Ebro y el macizo de els Ports por un lado y la serralada de Cardó por el otro.
Transcurridos los años, hace tres me enteré por medio de otro blog del amigo CASTELLO de Roquetes que mi buen amigo Ángel había fallecido, cuenta la anécdota que en la clínica donde estaba hospitalizado le preguntaron si él era de ROQUETES contestando con aquel acerbo que le caracterizaba "MES QUE NINGÚ".
Amigo ÁNGEL, TE RECORDARE MIENTRAS VIVA¡¡¡
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